En coche por Benasque, Hospital de Benasque, hasta el Parking de
Besurta. Está lleno, casi no se puede aparcar. Después de la clásica torta con café, emprendemos el camino hacia los
ibones de Villamuerta. Llegamos en seguida al primero, más bajo, y continuamos al de arriba. Hay bastante subida, pero merece la pena, desde este segundo tenemos unas vistas tremendas sobre todo hacia
el Aneto y su glaciar.
Pequeño descanso y contiuamos hacia
el Forau de Agualluts. Tenemos
que descender hasta el valle y caminar luego hacia el forau. Antes
encontramos un grupo numeroso de narcisos con su flor amarilla
característica.
Clásica foto de Aigualluts con Aneto al fondo.
Comemos el bocadillo en las cercanias de Aigualluts y continuamos avanzando hacia
el Ibon del Toro. Parte de este camino esta nevado y vemos por todo el camino gran cantidad de marmotas.
Algunas se dejan fotografiar.
Llegamos al Ibon del Toro. Hay gran cantidad de nieve y el lago está practicamente helado. Con cierta dificultad por la nieve helada, pasamos al otro lado del lago desde donde divisamos el Valle de Aran.
Regresamos nuevamente hasta los coches en Besurta.
4 horas y media caminando.
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